martes, 30 de septiembre de 2008

Noria

Sigo dándole vueltas a la noria, a la Noria de Tele cinco, sin poder evitarlo.
Me viene a la cabeza el hecho de que los insultos vertidos en una dirección, son todo un contrasentido. ¿Cómo se puede ser un machista cabrón?
Si atendemos al significado primigenio de la palabra cabrón, es decir “Consentidor del adulterio de su cónyuge”, vamos una especie de hippie de los de viva el amor libre. Por tanto ser machista y cabrón, al menos a mí entender, son conceptos antagónicos, cuando no contradictorios.
“Jodido machista” hubiera sido mas propio. Un machista que se siente jodido por los argumentos de la adversaria dialéctica. Pero machista cabrón, pues tiene poca lógica.
Aun mas, el uso del termino cabrón con finalidad ofensiva, creo yo, conlleva el ser portador (portadora en este caso) de ciertos perjuicios sexuales y por tanto de cierto sexismo a la vieja usanza. Porque si se da el caso de que una pareja ha decidido mantener una relación abierta, es decir una pareja en la que ambos “son consentidores del adulterio de su conyugue”, el uso peyorativo del palabro es un ataque frontal a una forma de relación que quizás no sea la norma, pero que desde posiciones progresistas debiera de ser tan respetada como cualquier otra.
No hacerlo así, aferrarse a los viejos conceptos, significaría considerar que la Sra. del insultado ha estado, o esta, haciendo algo malo, i.e. es una perdida (por no decir la otra palabra que comienza con P)
Con esto, no estoy dando la razón al uno o quitándosela a la otra, aunque cierto es que cuando se llega a utilizar cierto tipo de lenguaje, pues la razón se desvanece, y en mente de todos los que vieron el enfrentamiento entre Miguel Angel Iglesias y Maria Antonia Iglesias, esta claro quien utilizo el lenguaje mas soez.
Pero si eso hace que aumente la audiencia….
Un saludo

1 comentario:

Merche Pallarés dijo...

Solo faltaba que ahora en los debates "serios" tambien se pongan a parir... País. Besotes, M.