jueves, 30 de septiembre de 2010

La Huelga

30 de Septiembre, se acabo la tontería. Es el momento de dejar a un lado las posturas folclórico-sindicales y ponerse a trabajar como Dios manda, que el país lo necesita.
Claro que por aquello del materialismo marxista y el consiguiente ateismo los lideres sindicales, sus liberados y sus mamporreros no piensan seguir los dictámenes de Dios y seguirán mamando de la vaca de las subvenciones de papa estado que son administradas precisamente por el gobierno contra el que, supuestamente, dirigieron ayer sus criticas. ¿Para que trabajar cuando podemos mamonear gratis? Si yo les entiendo, a todos nos gusta vivir sin dar un palo al agua.

En el Reino Unido las cosas son un tanto diferentes. No solo los sindicatos no maman de la vaca de papa estado, sino que son soportes básicos tanto a nivel económico como a nivel político del partido laborista y de sus dirigentes.
Tanto es así que la influencia de los sindicatos a la hora de elegir líder laborista es tal, que los candidatos lamen nalgas sindicales de forma descarada, dándonos la vara a quienes somos miembros del sindicato por razones laborales y no ideológicas. Fíjense que paradójica. Soy militante y candidato al ayuntamiento por el partido liberal-demócrata, y sin embargo tuve (aunque no la ejercí) la oportunidad de enviar mi papeleta para decidir a quien quería ver al frente de los laboristas. Imagínense a un militante popular pudiendo influir en la elección del líder del nuevo líder del PSOE… pues algo así es lo que he vivido en las últimas semanas. . Increíble, pero cierto.

En el Reino Unido hay otras diferencias y las huelgas generales no existen. No se si están prohibidas por ley como se ha dicho en algunos medios de comunicación española, aunque algo de eso hay, pero lo que si es cierto es que no se estilan. La última huelga general en UK fue en 1926 y duro la friolera de 10 días… y es que entonces las cosas léase zapatos, maquinas e incluso huelgas, se hacían a conciencia, para que duraran…

Pero en España las cosas son diferentes. Los sindicatos sacan provecho de subvenciones pagadas por con dinero publico, es decir por todos. Reciben patrimonio sin saber muy bien por que (me parece bien que les devuelvan la vieja casa del pueblo confiscada durante la dictadura pero el resto… es de todos).
Si convocan huelga son capaces de saltarse los servicios mínimos y por tanto la ley cuando les apetece, de utilizan medios de coerción o incluso la violencia para forzar a los que quieren trabajar a seguir sus dictámenes, mientras las autoridades miran hacia otro lado y la oposición, pues eso, tocando el violón.

No es de extrañar por tanto que la situación economica en España también sea diferente con respecto a los países avanzados de Europa.