Las cenizas de Angela

No es un secreto el hecho de que disfruto leyendo. Un libro por semana de media, aunque hay veces que no llego (otras me paso)
Naturalmente disfruto más algunas lecturas, que otras. De hecho hay momentos en los que me veo tentado cerrar el libro y olvidarlo. Pocas veces, pero alguna vez ha pasado.
Disfruto leyendo en cualquier idioma (de los que entiendo) aunque especialmente en castellano, por aquello de que no solo disfruto de la obra en cuestión, sino que ésta actúa como un medicamento relajante tras toda una jornada teniendo que hablar un idioma que no es el mío. Pero por desgracia no es fácil encontrar libros en mi idioma. En fin a buen hambre…
Acabo de leer un libro fantástico. Libro viejo, eso si, pero fantástico. Siento no haber lo leído antes, pero así son las cosas.
El titulo, seguro que les va a resultar familiar a muchos de Uds. “Las cenizas de Angela”, una autobiografía del autor donde se narran las peripecias de sus primeros años de vida.
He de reconocerlo. Soy un poco rarito.
Dicen los expertos que, cuando hay un libro y una película, es mejor leer el libro primero y visionar la película después. Yo opino lo contrario.
Soy de la opinión que un libro siempre es mejor que una película. En eso coincido con los ortodoxos. Sin embargo la razón por la que prefiero ser heterodoxo y por tanto ver la película antes que leer el libro es que esa practica me produce un placer extra, ya que me permite poner cara y aspecto físico a los distintos caracteres y espacios, aunque me consta que hay quien opine que parte del placer es precisamente eso, imaginar los aspectos físicos de los lugares o las caras de los personajes.
Pero a lo que iba, he leído ese libro y hacia mucho tiempo que no disfrutaba tanto. Y eso que, a fuer de ser sincero, el libro no es precisamente un canto al optimismo. ¿O quizás si? Quizás, si leemos entre líneas, podemos vislumbrar entre tanta tragedia un canto a la esperanza, aunque tan solo sea por el hecho de que el autor fue capaz de sobrevivir y escribir el libro.
Si no lo han hecho, les recomiendo que lo hagan, que lean este libro, que entiendan lo mucho que el alcoholismo de un padre unido a circunstancias sociales perversas o marginales pueden a todo un colectivo familiar. Pueden también ver como con tesón se puede salir hacia delante incluso en casos de miseria extrema.
Un saludo